lunes, 25 de febrero de 2013

¿Qué camino tomar?

Dice un adagio popular: "Todos los caminos llevan a Roma" en el ámbito geográfico esto puede ser muy probable. Dijo nuestro Padre en Isaías 55:8 que nuestros caminos no son como sus caminos; pero, ¿qué nos hace falta para poder igualar sus caminos?. La verdad que nos hace falta mucho por recorrer, actitudes que dejar, pensamientos que olvidar y sobre todo seguir las indicaciones.

¿Qué camino no tiene señales? las señales en los caminos nos sirven para saber con exactitud lo que se nos aproxima. En el camino de la vida las mejores señales son las que encontramos en las sagradas Escrituras, es allí donde nuestro Padre nos da la respuesta a nuestros problemas. En la oración nosotros hablamos con Dios y en la lectura de la Biblia es Dios hablando a nuestros corazones. Por eso es urgente tener un tiempo a solas con Dios para meditar en su Palabra, un tiempo de intimidad en el que podamos estar plenamente convencidos que lo que leemos es la viva palabra de Dios.

En muchos países es prohibido hacer uso de una Biblia, ya que nosotros tenemos ese privilegio no debemos desperdiciarlo. Es ahí donde las señales saltan de las palabras escritas, saltan a nuestros corazones y nos proporcionan esa dirección necesaria para nuestras vidas.

En la vida encontraremos distintos tipos de caminos que van desde caminos llanos, pendientes, bajadas, con obstáculos o sin ellos; pero una cosa debemos tener en cuenta, lo que Dios nos dice en el salmo 37:5, de cualquier tipo que sea nuestro camino debemos encomendarlo a Dios, muchas veces nos quejamos de que las cosas no nos salen como hemos planeado, y hasta cierto punto culpamos a Dios de eso. La culpa de que nuestros caminos no nos lleven hacia donde queremos llegar es de nosotros por no tomar en cuenta a Dios en todas las áreas de nuestra vida, ¿cómo pretendemos pues que todo nos resulte color de rosa si primero no vamos al Padre en busca de dirección? ¿cómo  pues pretendemos llegar a Dios si primero no buscamos a Cristo Jesús que es Él único camino para llegar al Padre? (Juan 14.6)

Así es que nuestros caminos pueden convertirse de tormentosos a tranquilos si seguimos las señales que Dios nos da a través de su Palabra. Y el mejor camino que podemos tomar en nuestras vidas es a Cristo Jesús que nunca nos fallará ni nos dará la espalda, además de ser el ÚNICO camino que nos lleva al Padre.

Bendiciones.
1Co.2:9


martes, 19 de febrero de 2013

Para no lamentarse

Llegará el momento en nuestras vidas en que tengamos que decirle adiós a un ser querido, fácil es decir: hay que ser fuertes, hay que resignarse, Dios sabe lo que hace o darle ánimo a esa persona de nuestra familia que se siente mas dolida. Pero ¿de dónde viene esa fuerza? es un tipo de fortaleza que no la da el asistir diario a un gimnasio o tomar vitaminas para lograr ser fuerte en esos momentos difíciles.

Filipenses 4:13 nos dice que todo lo podemos en Cristo que nos fortalece, esas palabras de Pablo que parecen sacadas de la manga de la camisa, esto es así porque la raza humana tiene la pésima costumbre de agarrar de todo solo lo que en el momento es mas conveniente, convirtiendo así la sagrada Escritura en un simple pretexto para poder defendernos en momento de angustia, no así para hacerla nuestra y creer en el corazón que lo que ahí está escrito es la verdadera Palabra de Dios.

En la medida que creamos en nuestro corazón que lo que está escrito en La Biblia es la real y verdadera Palabra de Dios, llegará a nosotros esa fortaleza, llegará esa fe que necesitamos y que urge ponerla en práctica para poder esperar con paciencia esas bellas promesas que Dios tiene para nosotros.

Nuestros seres queridos al momento de partir quedan en nuestra mente y en nuestro corazón, solo queda agradecer a Dios por los momentos bellos que nos permitió disfrutar juntos. Lo que duele en el alma y no tiene vuelta atrás es saber que no se les pudo hablar del evangelio, hablar de ese reino precioso en el cual nos gozaremos todos aquellos que tengamos al  Espíritu Santo de Dios en nuestros corazones, fruto de aceptar a Cristo como nuestro único y suficiente salvador vamos a vivir.

Duele saber que no podremos compartir con nuestros seres amados, la gloria que Dios tiene preparada para nosotros, pues ya nada se puede hacer para remediar tremenda falta; pero si ya vivimos ese dolor, nos debe quedar de experiencia, así hablarles de Cristo a esas personas que aun tenemos la dicha de tenerlas entre nosotros.

Si seguimos a cabalidad la Palabra de Dios nos dice el evangelio de Mateo en el capitulo 22 y versículo 39 que debemos amar a nuestro prójimo y nuestro prójimo no es solo aquella persona que me cae bien o la que me hace favores, mi prójimo eres tú, tu prójimo soy yo, somos todos. Así que a llevar el mensaje de salvación a todo aquel que lo necesita para no lamentarnos mas tarde. Dios los bendiga.

P.D.: Te extraño papá!!! 

jueves, 14 de febrero de 2013

Dios es amor!!!

Muchas veces dedicamos a pasar el tiempo pensando en lo que es en realidad el amor. Según la Real Academia de la Lengua Española amor es: Sentimiento hacia otra persona que naturalmente nos atrae y que, procurando reciprocidad en el deseo de unión, nos completa, alegra y da energía para convivir, comunicarnos y crear. 

Como podemos decir que en realidad nosotros amamos, no basta con decirlo, si bien es cierto causa es de alegría el escuchar de la persona que uno quiere lo que siente por uno, también es cierto que es un complemento necesario el poder demostrarlo.

La sociedad en que vivimos (consumista) se ha encargado de hacer ver que si una persona no compra algo para regalar a la persona amada, no la ama de verdad, aún, entre mas valor el objeto comprado, mas es el amor que se le tiene a esa persona. El amor lo demostramos con una llamada telefónica, lo demostramos respetando y valorando a esa persona amada, se demuestra con un abrazo, etc.

Podemos nosotros demostrar el amor de la mejor manera, pero nunca podremos llegar a amar a alguien como lo hace nuestro Dios, Él a pesar de saber lo desobedientes que somos con Él nos dio lo que mas amaba, su único hijo Jn.3:16 y todo para que tengamos vida eterna. Qué muestra de amor mas grande!, nosotros como hijos suyos estamos llamados a corresponder ese amor y pues sabemos que nunca lo igualaremos, lo menos que podemos hacer es obedecer sus estatutos.

En la primera epístola de Juan lo dice muy claro:  El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. 1Juan4:8



miércoles, 13 de febrero de 2013

El arrepentimiento Lc.3:3

Todos aquellos a los que en alguna vez hemos sentido que le hemos fallado a Dios, hemos experimentado una sensación de culpa en nuestro interior. Si nosotros hemos confesado a Cristo como nuestro único y suficiente salvador personal, tenemos en nuestro corazón a Su Espíritu Santo y es Él quien nos indica todo aquello que sabemos de antemano que no agrada a nuestro Padre.

¿Cómo podemos hacer para dejar de sentir esa sensación de "culpabilidad"? simple. Debemos en primer lugar confesar a Dios nuestras culpas, Él en su infinita misericordia nos otorgará el tan deseado perdón, sólo hay un requisito a cumplir. Al confesar a Dios nuestras culpas, debemos hacerlo de una manera sincera y de todo corazón, no esperando obtener el perdón para luego seguir cometiendo las mis acciones, sino para tener un propósito de enmienda. 

Luego de haber confesado nuestras culpas de todo corazón pues debemos mostrar esos frutos dignos de arrepentimiento, que no es mas que el evitar volver a cometer esas acciones que a Dios no le agradan. No es necesario hacer sacrificios, lo que a Dios le agrada es tener un corazón puro y humillado para adorarle.